TENTACIÓN CONSUMADA
Por su
mirada hechicera, surgió en mí una inclinación desconocida revestida de un
estímulo ardiente. Solía espiarle y era cuando comenzaba a humedecer mi braguita,
alterando mi libido. En cierta ocasión le vi leyendo un libro. Sin pensarlo le
abordé. Acercándome torpemente tomé su rostro, besándole en la boca, llevada
por el instinto. Reconocí entonces la diversidad en la madre naturaleza…
No hay comentarios:
Publicar un comentario